La práctica de la responsabilidad, el orden y la honradez, el respeto a la Ley, el amor al trabajo, son formas de comportamiento que alientan y promueven un mayor nivel de bienestar, que pertenece al campo de la ética y de los valores, que dependen de las condiciones del entorno, en las cuales cada uno de nosotros ocupamos un lugar especial, estableciéndose los siguientes valores:
-Respeto: Haciendo que los miembros de la institución se acepten y convivan en armonía, sin discriminación alguna.
-Responsabilidad: Cumpliendo con las obligaciones estudiantiles y laborales sin necesidad de coacción.
-Justicia: Implica el concepto de igualdad y el de equidad (Disposición de dar a cada cual lo que le corresponde)
-Libertad y Autonomía: Permite discernir, decidir y optar por algo sin presiones ni coacciones, para desarrollarse como ser humano en todo su potencial.
-Democracia: Fortaleciendo la toma de decisiones y acuerdos entre las partes implicadas, respetando la diversidad de opiniones, de culturas, de lenguas, de creencias y perspectivas.
-Tolerancia: Reconociendo la dignidad de todo ser humano y de su derecho a ser diferente para que la persona interactúe con los demás en un clima de equidad e inclusión.
También, se promoverá en nuestra institución el desarrollo de la autoestima como base principal del respeto hacia los demás, la capacidad para poder competir sin ningún privilegio, la lealtad, la solidaridad y el autocontrol, la tolerancia y la flexibilidad para poder realizar trabajos en equipo, capacidad de crítica y autocrítica, responsabilidad y justicia social, capacidad gerencial y de innovación. Es importante, también, que todos los miembros de nuestra institución educativa tengan conocimiento y dominio de su entorno, mediante un discernimiento racional y ético en permanente coordinación y colaboración con los demás, desarrollando por ende sus habilidades.